Hª del cine musical: Resumen, de ayer a hoy

By: Dec. 19, 2011
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En el pasado mes de agosto iniciamos esta nueva sección que analiza película a película la progresión, cualidades y anécdotas del cine musical. Un género enlazado directamente con su modalidad en el teatro. Aprovechamos el final del año para realizar un repaso por todos los títulos que hemos expuesto a lo largo de estos cinco meses y mostramos el corto 7: 35 de la mañana, un ejemplo de cine musical hoy:

Llegada del sonoro

El cantor de jazz de Alan Crossland estrenada en 1927 es la que se considera de forma oficial la primera película sonora. El cine dejaba de ser mudo para dar voz a sus personajes. Resulta que la primera película sonora también fue musical. Desde este primer momento se muestra a Broadway como la ciudad idónea para desarrollar una carrera artística. Aspecto que se vería reflejado en largometrajes posteriores. El cine sonoro sufrió unos inicios turbios donde ni las majors, por cuestiones industriales, ni las figuras más importantes como Charles Chaplin, que abogaba por los avances narrativos del cine mudo, lo apoyaban. Sin embargo, el sonoro se asentó y con ello el cine musical.

El jazz

La película cuenta la historia de un chico que quiere dedicarse a la canción jazz. Su padre, un rabino, ve en su hijo la prolongación de la tradición familiar de ser cantor de sinagoga. La comunión de jazz y folclore es protagonista de esta historia de conflicto entre padres e hijos. El jazz crecería en el cine más allá de esta primera película. Martin Scorsese así lo confirma en 1977 con New York, New York. Una película negra que rompe los moldes establecidos del cine musical por su estética y atmósfera. Las melodías de jazz describen la ciudad oscura, las contrariedades de los personajes, las luces y las sombras de toda la narración.

Temática amorosa

Pero, el estilo negro no es lo que prima en el cine musical. Para comprobarlo podemos ver las películas de Stanley Donen Cantando bajo la lluvia (1952) o Siete novias para siete hermanos (1954). En la primera se reflejan a través de un envoltorio ameno las dificultades que sobrepasó el cine  para adaptarse a las exigencias del sonido. Mostraba una realidad en la que las estrellas de la gran pantalla debían reaprender a interpretar con un nuevo elemento a tener en cuenta, su voz. Siete novias para siete hermanos, con su colorido y coreografías imposibles, lleva al máximo la trama amorosa que se desarrolla en gran parte de estas películas.

Funny Girl (1968) de William Wyler, Sombrero de Copa (1935) de Mark Sandrich, en pleno apogeo del cine musical y un Americano en París (1951) de Vicente Minelli son un ejemplo más del amor como argumento que se suele utilizar como vía para mostrar otros temas. En el caso de de Minelli lo emplea para crear una ambiente bohemio en la vida del viejo París. Este cine también posee una cara afable con el público infantil al ofrecer historias donde las ayas son las estrellas, ya sea una bruja como en Mary Poppins (1964) de Robert Stevenson o una novicia como en Sonrisas y Lágrimas (1965) de Robert Wise.

Cine musical como denuncia social

El cine musical también ha servido para denunciar los conflictos de las sociedades modernas. En 1961 se estrena West Side Story de Robert Wise y de Jerome Robbins. Un musical que en 2011 cumple 50 años y que critica las diferencias entre generaciones, la violencia callejera, la marginación y el racismo. Una denuncia social que no se queda en el cine musical de los años 60. También hoy se realizan trabajos que reflejan la dureza de una realidad. Hablamos del cortometraje de 7:35 de la mañana (2003) de Nacho Vigalondo. Una de las peculiaridades de este corto es que el director justifica que los personajes canten. En las películas musicales los personajes interpretan números con motivo de un diálogo o una situación en concreto, la canción forma parte de la historia. Sin embargo, en este cortometraje la canción es la historia. Una historia que sucede en un lugar tan cercano como un bar, con una trama tan simple como la de un desayuno antes del trabajo o como la de un hombre enamorado de una mujer. Todo ello pone en relieve uno de conflictos que más nos preocupan hoy, el terrorismo:

 

 

 

 



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