BLOG - SARA PÉREZ: Concierto benéfico a favor del Dress Circle

La actriz y cantante Sara Pérez, que ha participado en musicales como El Diluvio Que Viene y Spamalot, además de en el espectáculo 'Espíritu de Broadway', ha querido compartir con los lectores de BroadwayWorld Spain sus impresiones acerca del concierto benéfico a favor del Dress Circle londinense, al que asistió el pasado 7 de agosto en la capital británica.

Durante 33 años Dress Circle ha sido más que una tienda emblemática de Londres. Como Kerry Ellis dice en el programa de mano: "Has been a part of my life". Se trata de un lugar de culto en cuanto a merchandising musicalero, partituras, Cd's originales, playbacks y un largo sinfín de curiosidades, rarezas y tazas. La crisis y un evidente e inevitable cambio en el mundo de la música han hecho estragos incluso en este paraíso del género musical.

Y así llegamos al 7 de agosto de 2011 en Her Majesty's Theatre, donde actualmente se representa El Fantasma de la Opera, para ver como se levantaba el telón a las 19:30h en una emocionante e irregular gala benéfica que comenzó con una trepidante obertura de Gypsy, interpretada por los más de veinte músicos que se encontraban en escena, dirigidos por un enérgico Simon Lee, sin duda el gran protagonista de la noche.

AlEd Jones fue el maestro de ceremonias, y amenizó la velada con ingeniosas bromas sobre el gremio, cebándose en concreto con Betty Blue Eyes. Personalmente destacaría como los momentos de la noche The Old Red Hills of Home interpretado por el cast original de la producción de Parade del Donmar, el espectacular Defying Gravity de Ashley Gray que provocó la envidia de todas las cantantes que estábamos en la sala, el bloque DreamGirls con las estupendas The Idolls que levantaron el aburrido segundo acto con One Night Only, y Landi Oshinowo, que atronó Her Majesty's con And I'm Telling You I'm Not Going y demostró por qué es la poderosa dragona de Shrek.

El público londinense aclamó a algunas de las estrellas emergentes del West End como Ramin Karimloo, que interpretó de manera impecable Music of the Night, o Alex Gaumond con Lune, que fue el guiño a los productos musicales de habla no inglesa. Los momentos más emocionantes fueron la aparición de Frances Ruffelle, Eponine en la producción original de Les Miserables de Londres y que también lo interpretó en Broadway, cantando A Heart Full of Love junto a Rebecca Caine y Jon Robyns. Debo reconocer que fue extraño escuchar el tema cantado por otro Marius teniendo a mi lado al de la producción de Madrid, mi buen amigo Guido Balzaretti. Otro de los momentos más esperados fue poder escuchar a Claire Moore, la Helen original de Miss Saigon, interpretando I Still  Believe.

Pero sin duda debo resaltar lo que supuso tener en escena a Ellen Greene, popular actriz que dio vida a Audrey en Little Shop of Horrors, que interpretó la canción Between de  Betwix, y nos sorprendió, fuera de programa, con un emocionante Somewhere That's Green del musical que la llevó al Olimpo de las divas del género. Se permitió el lujo de quedarse en blanco a media canción y reconoció sin avergonzarse que era difícil para ella interpretarla de nuevo. A pesar de esto no hubo nadie que provocará un aplauso tan rotundo en Her Majesty's esa noche, rompiendo con su "imperfección" la habitual frialdad escénica de los británicos.  No tuvimos más remedio que rendirnos a la sincera ternura de Ellen Greene.

Muchos fueron los que pisaron el escenario (excepto Hannah Waddingham, que finalmente no participó por enfermedad y fue sustituida por Helen Hobson): el reparto original de Avenue Q con la chispeante Julie Atherton, la bellísima Samantha Barks, el veterano Peter Policarpou que interpretó un brillante Bui-Doi, el coro formado por alumnos y alumnas de la Royal Academy y Mountview Academy, que interpretaron Sunday de Sunday in the Park with George, y entre los que seguro se encontraba alguna de las futuras estrellas del West End... y entre el público alguna que otra cara conocida, como Ruthie Henshall. Todo ello con un repertorio de lujo, aunque con algún que otro momento desconcertante, como el Take Me Or Leave Me de Jodie Jacobs y Debbie Kurup, que me hizo pensar aliviada: "Si, en el West End también se equivocan".

Pronto sabremos si el esfuerzo será suficiente para mantener en pie Dress Circle, lo cierto es que los tiempos cambian de manera irremediable y eso es algo que ninguna gala benéfica puede cambiar. Quién sabe si en un futuro no muy lejano tendremos un concierto de estas características en Madrid para salvar una tienda emblemática, bar, cafetería... o las fiestas del Orgullo que el Ayuntamiento amenaza con desterrar. Sería bonito poder soñar con reunir nuestros "Original Cast" de Bella y Bestia, Germans de Sang, Evita o Company en lo que, estoy segura, no sería un "Ordinary Sunday".

Sara Pérez

Web oficial de Sara Pérez