2013 parece que será el año de Cats, porque hace poco se anunció también que se representará en el Regent's Park Open Air Theatre en verano del año que viene:
Joanna Ampil (una de las Kims de Miss Saigon más célebres) interpretará a Grizabella en la nueva gira británica de Cats, que arrancará en febrero de 2013:
Tras más de 20 años de ausencia en los escenarios del país, Cats regresa a la cartelera mexicana el próximo 10 de mayo. En principio se representará en México, D.F., pero está previsto que la obra también visite otras ciudades. Como curiosidad, una española (Ana Cirré) será una de las intérpretes que se pondrán en la piel de Grizabella:
Este señor (a veces parece Señora) está un poco rabioso por el éxito de Los Miserables. No debería ser así, mantiene en cartel El fantasma de la Ópera en los dos principales núcleos de musicales desde hace más de 25 años (Miserables fue retirado en su momento), además de giras, etc. Cierto es que ningún título de los últimos que ha creado ha sido un éxito (ni The Woman in White (que a mí me encanta) ni Love Never Dies) y quizá es por eso que intenta llamar la atención hacia sus posibles adaptaciones al cine. Pero... seamos sinceros... de verdad CATS puede funcionar como película? Si ya sobre el escenario tiene poco sentido... en cine la gente puede salir echando verdaderas pestes sobre ella.
Eso mismo pienso yo. Con la filmación directamente para vídeo que ya existe de Cats es más que suficiente.
Si Andrew Lloyd Webber quiere un éxito cinematográfico respaldado por la crítica yo creo que el título con más posibilidades es Sunset Boulevard. Con una buena protagonista (incluso Glenn Close aún estaría a tiempo de hacerlo) podría ser la bomba.
Hoy ha tenido lugar una presentación en el London Palladium, en la que, entre otras cosas, se ha adelantado que seguramente se hagan cambios en las coreografías para modernizarlas, y también en el personaje de Rum Tum Tugger, que podría acabar convirtiéndose en un rapero:
¿Sí, verdad? ¡Pensé lo mismo! Aún así tengo muchas ganas de verla igualmente. No es que sea seguidor de esta mujer, pero he visto algunas actuaciones suyas y me parece bastante potente. Así que a ver qué tal como Grizabella.
Ayer, por cierto, "robé" un cartel del musical en la calle xD En una de las calles de Charing Cross, lo vi en una pared a punto de caerse y sin dudarlo lo descolgué y me lo llevé a casa. Ya lo he puesto en mi habitación y queda fantástico!! xD
La red está en llamas por la nueva imagen de algunos de los personajes del musical. Qué opináis vosotros?
A mí, a pesar de ser un título que en su momento me encantó y vi varias veces, me parece que ya se ha quedado un poco (bastante) anticuado, y no veo necesidad ninguna de traerlo de nuevo a los escenarios (Lo siento Mr. Webber). Y menos, de convertirlo en película, como se viene comentando últimamente.
Para mí Cats fue uno de los primeros musicales que vi hace ya unos cuantos añitos... seguramente por eso lo tengo un poco en el grupo de los "intocables". Adoro la partitura y la coreografía y para mí esto que han hecho de cambiar por ejemplo el traje de Rum Tum Tugger (parece un disfraz del chino de la esquina) es un desacierto.
Lo de convertirlo en película tampoco me cabe en la cabeza... hay ciertos títulos que solo funcionan encima del escenario y no en los cines (Hairspray, El Fantasma, ...).
Yo le tengo cariño a Cats porque es el primer musical que vi en un teatro, y musicalmente sigue siendo una obra que me gusta mucho por sus melodías. Pero su argumento siempre ha sido su gran punto débil. En su día fue muy innovador visualmente, pero hoy por hoy no aporta mucho más allá de su valor como clásico...
En cuanto al revival, la Grizabella guapa y el Rum Tum Tugger rapero me chirrían bastante. Aún así, reconozco que me encantaría verlo... :)
A mí con Cats me pasa un poco lo que a todos, que sin ser uno de mis favoritos le guardo un cariño especial. Fue uno de los primeros musicales no cinematográficos que conocí (a través de la canción "Memory", cómo no) y a pesar de que efectivamente su (no) argumento es bastante infantil y simplón, lo cierto es que musicalmente tiene unas cuantas piezas interesantes y creo que sus coreografías siguen aguantando el tipo después de tantos años. Eso sí, es un musical para ver en directo, porque la película para vídeo de 1998 es un rollo (y eso que elimina ese pasaje coñazo e interminable llamado "La última proeza de Growltiger").